Connect with us

Atlántica XXII

Cuidado con el “Perro Loco”

Destacado

Cuidado con el “Perro Loco”

Donald Trump ha nombrado secretario de Estado de Defensa al general James Mattis, apodado "Perro Loco".

Donald Trump ha nombrado secretario de Estado de Defensa al general James Mattis, apodado «Perro Loco».

Luis García Oliveira / Así lo quiso Donald Trump y, desde el pasado día 2, ya está confirmado que será el retirado general de Marines “Perro Loco” Mattis quien se ¿responsabilizará? del Departamento de Defensa norteamericano, popularmente más conocido como el Pentágono.

Parece ser que está tipificado como un “halcón” –una subespecie de tipo duro, de esos que no suelen gastar demasiados escrúpulos allí donde tienen ocasión de darlos a ver– y que fue jefe de operaciones de los EE.UU. en Oriente Medio hasta 2013, fecha en la que le relevaron anticipadamente por supuestas e inespecíficas “discrepancias” con el todavía hoy inquilino de la Casa Blanca.

Espero que mis temores no se confirmen, pero es probable que el transcurso del tiempo deje a la luz pública la verdadera naturaleza de unas “discrepancias” que harían temer las potenciales consecuencias de una mezcla tan explosiva como la alta jefatura militar de este individuo con la disponibilidad de un ejército tan poderoso como el que va a tener a sus órdenes.

Un ejército que no ha demostrado aún haber evolucionado hacia una “ética operativa” muy diferente a la que en su día exhibió ante el mundo entero bombardeando con napalm sobre la población civil vietnamita. Conviene no olvidarlo, porque ya se sabe que cuando se olvida la historia se está condenado a repetirla o a consentir que se repita.

A pesar de su labrada fama, se dice que está considerado “menos radical” que otro compañero de armas, el también retirado general Michael Flynn, designado por Trump para ejercer de Consejero de Seguridad Nacional –nada menos– en el nuevo gabinete gubernamental y abiertamente opuesto al acuerdo firmado entre la comunidad internacional y Teherán –en julio de 2015– sobre el plan nuclear iraní.

Una inquietante pareja, ¿verdad?, sobre todo teniendo en cuenta la delicada naturaleza de la gestión que cada uno de ellos va a tener que asumir en breve.

Con la elección de Ronald Reagan, primero, y la de George W. Bush después, algunos creímos que ya había quedado suficientemente explícito el significado último de la legendaria frase en la que reza que “cualquiera puede llegar a ser presidente de los EE.UU.”, pero ahora no queda más remedio que reconocer que con la de Donald Trump se han dado unas cuantas vueltas de tuerca a la más peyorativa interpretación que se pueda hacer de su verdadero significado.

Siendo esto así, a nadie debería de extrañar la designación presidencial de estos dos ejemplares individuos para unos cargos tan transcendentes, no solo para el pueblo norteamericano, sino para el resto del mundo en donde el Imperio tenga algún tipo de interés, aunque no sean necesariamente legítimos ni confesables.

Queda por ver si el ya próximo presidente norteamericano se reafirma en el cargo tal como se mostró en su montaraz papel de candidato: un impresentable patán, machista y arrogante –un completo “faltoso”, que diríamos en esta tierra– o si aquello solo fue la calculada palabrería de un bocazas ante una desnortada galería electoral, que se vio desvalida frente a la ineludible tesitura de tener que elegir entre él y una farsante compulsiva como Hillary Clinton.

¿Alguien se imagina el impacto social y mediático que causaría en cualquier país europeo un nombramiento equivalente al del general Mattis si es que al designado le precediese el sobrenombre de “Perro Loco”?

Algo impensable, ya que aquí es más que probable que alguien popularmente así apodado –por el solo hecho de serlo– no tuviese la menor posibilidad de acceder a un cargo de esa relevancia.

Pero en los EE.UU. corren otros vientos en esta y en otras muchas cuestiones y, según parece, nadie se escandaliza allí de que al frente de dos de las áreas más delicadas de la Administración del país –la tan equívocamente llamada de Defensa y la de Seguridad Nacional– se sitúe a dos personajes con un historial tan controvertido.

Pronunciamientos y silencios

Pero todo esto ocurre muy lejos, al otro lado del Atlántico, y aquí resultan muy ilustrativos algunos de los pronunciamientos políticos al respecto y, también… los silencios.

A don Mariano, tan poco dado él a exteriorizar emociones, le faltó tiempo para hacer llegar al futuro presidente su más entusiasta felicitación. Vista la inmediatez con la que públicamente le transmitió su desbordada alegría por lo acontecido, habría que concluir que le seguía la pista muy de cerca en la campaña electoral y que debió de ser tan de su gusto que acabó convirtiéndose en un auténtico “hooligan” de Trump, cosa que no cuesta entender en un carácter tan temperamental e impulsivo como el del gallego.

Y por supuesto, de don Mariano para abajo en el PP, ni una sola objeción a la elección del susodicho ni a cuanto mayoritariamente se intuye que puede devenir de la misma en el ámbito internacional. ¡Faltaría más!

Entre la prensa más seguidista –perdón, formalista quería decir– tampoco demasiado que objetar, que nunca conviene mostrarse irrespetuoso con quien va a ostentar y concentrar en su persona tanto poderío e influencia, económica, militar y mediática también. O sea, que un respeto, ¿vale?

Es lo que tienen los imperialismos triunfantes, que además de muy respetados mientras son vigentes, no se sienten en la obligación de tener que dar explicaciones a nadie de sus conductas –sean cuales sean– y, si alguien cayese en la temeraria tentación de pedírselas a extramuros de sus fronteras, la correspondiente respuesta le llegaría a través de la poderosa razón que siempre da la fuerza y no al revés.

Pero bueno, que nadie se preocupe si esto último no ha quedado suficientemente claro; casi con toda seguridad que, en breve, el Sr. Trump y compañía se encargarán de escenificar unos ilustrativos ejemplos prácticos que despejarán toda posible duda al respecto. Al tiempo, que es cosa de poco.

Continue Reading
Click to comment

You must be logged in to post a comment Login

Leave a Reply

Más en la categoría Destacado

Último número

To Top