Entrevista a Luis Prado Hevia, portavoz de Escaños en Blanco
Daniel Ripa / Investigador Departamento Psicología Universidad de Oviedo. La desafección y el rechazo hacia la clase política se manifestó en Asturias en las últimas elecciones autonómicas es una abstención del 45%, pero también en los buenos resultados de Escaños en Blanco, que se convirtió en la quinta candidatura más votada, la primera de las extraparlamentarias. Obtuvo 4.000 votos y casi un 1% de los sufragios. Escaños en Blanco – que ya consiguió tres concejalías en Catalunya- tuvo en Asturias como cabeza de lista a Luis Prado Hevia (Villaviciosa, 1976), un farmaceútico que reside en Xixón.

Luis Prado Hevia
¿Quién conforma Escaños en Blanco y por qué surgió?
Hemos conformado un grupo de gente con ganas de hacer cosas. Escaños en Blanco tiene muchos perfiles, desde gente que participa porque no encuentra ningún partido que le represente o porque está descontenta con las políticas llevadas a cabo, hasta otras personas que demandan cambios de más calado.
En mi opinión personal, creo que es necesario un proceso constituyente que reforme el sistema de arriba abajo. De hecho, aunque ganara el partido político con el que más me identifico, tendríamos los mismos problemas. Es necesaria una reforma de más calado. El sistema está podrido.
La gente en la calle está harta, ha dejado de creer en este sistema y por ello hay un mayor desapego de la clase política. Buscamos recoger a la gente que no está de acuerdo, computando el voto protesta para hacer práctica nuestra reivindicación: reformar la LOREG (la Ley Electoral) para dar cabida al voto de protesta. Una parte muy importante de la población está hasta las narices. Dos personas tienen plena potestad durante cuatro años. Hay gente que quiere reflejar que no estamos en una democracia real.
La población tiene una impotencia terrible. Los Gobiernos los pactan entre dos o tres personas. Los diputados son mercenarios del cabeza de lista durante los siguientes cuatro años. La gente va demandando una democracia más participativa. Hay que remodelar la democracia desde la base.
¿Aceptarían los partidos políticos esta reforma de la LOREG (Ley Electoral)?
Va a depender de la implicación de la gente. Es una decepción que el 45% de la población se haya quedado en casa. Nunca la abstención ha servido para nada, que alguien me diga un solo caso donde haya sido útil. En Gijón, los distritos Centro y Viesques han tenido la mayor participación. Allí, Foro y PP han doblado al resto de partidos, han arrasado. Sin embargo, en los distritos humildes reciben la mayor abstención. ¿Qué consecuencias tiene que exista un 45% de abstención? Ninguna. ¿Qué consecuencias tendría que el 45% de los escaños de un Parlamento se quedaran vacíos? De hecho, un solo diputado en Asturias llevaría a que este modelo se replicara en muchos otros lugares.
¿Soportan muchas críticas?
Recibimos muchas críticas, pero luego mucha de esa gente se abstiene. EB no pretende obligar, sino abrir una opción más.
¿Cuál es la relación de Escaños en Blanco con el 15-M?
El partido surge originalmente en Baleares hace 8 años (bajo el nombre de Escons Insumisos). Luego pasa a Catalunya, como Ciutadans en blanc. Hace un año, cuando en las municipales obtuvieron representación, el partido consigue repercusión estatal. Por lo tanto, es un fenómeno anterior al 15-M.
Del 15-M hemos tenido bastantes críticas, aunque también se ha unido gente que había participado en este movimiento.
¿Cómo surge en Asturias?
EB tiene cinco meses de vida en Asturias. Nace en octubre. Escribo a la coordinación estatal para votarles y resulta que no tenían gente en Asturias. Empezamos tres personas a recoger las firmas necesarias (1.000). Obtuvimos 2.400 votos al Congreso y 6.000 al Senado. La gente no tiene consciencia de que el Congreso es tan inútil como el Senado. Ahora somos más de veinte, muy activos. En la primera entrevista nos ridiculizaba el periodista. Ahora siguen nuestros actos los medios y recogen nuestros comunicados de prensa. A nivel estatal, estamos en veintitres provincias y después de los resultados de Asturias ya han contactado con nosotros desde Galicia y Canarias. Aportamos una herramienta nueva y un concepto novedoso. Cuando intentamos explicar lo que somos a la población, hay tres grupos: los entusiastas, lo que tardan en entenderlo y los que no lo van a entender nunca.
¿EB desvía la atención hacia otros problemas?
No. Los problemas que tenemos son de naturaleza política, no económica. Son los políticos los que permiten estos problemas. Estamos ayudando a centrar el problema. Tenemos un único punto en nuestro programa electoral: queremos que se reforme la LOREG para dar cabida al voto de protesta y entonces desaparecer.
¿Habrá otra vez elecciones en Asturias?
No creo que tengan narices para convocar otra vez elecciones. Si no llegan a un acuerdo, se juegan el cuello.
La situación en Asturias es fruto del hartazgo de la población.
¿Es EB un partido antisistema?
Puede haber partidos más antisistema que nosotros. Solo queremos dar más visibilidad a la gente que no está de acuerdo. Que se vea quién no quiere esto. Si el sistema es fuerte ha de verse quién no está de acuerdo. De hecho, el único antisistema es el propio sistema. Si el sistema funcionase bien, Escaños en Blanco no tendría ninguna posibilidad. Por ello, somos un termómetro de denuncia.
¿Cómo se puede controlar a los cargos electos para que no tomen posesión?
Ahora juran por escrito que no van a coger el cargo, aunque no se puede controlar que dejen el escaño. Por ahora se ha cumplido en los casos en los que hemos obtenido representación, pero en el futuro tendremos que ser más exigentes, estableciendo contratos legales más vinculantes.
JULIA
miércoles, 11 abril (2012) at 20:58
Bueno, parece que alguien va despertando y tienen mérito porque lo que interesa es que los jóvenes estén atontados con los jueguecitos y no piensen.