Gerardo Iglesias y el rey: «Se dieron prisa por el avance de la izquierda»

El fundador de IU está esperanzado con una confluencia con Podemos. Foto de Eloy Alonso/Semeya Press.

Gerardo Iglesias cree que la abdicación del rey Juan Carlos I estaba pactada entre el PP y el PSOE, que » se dieron prisa antes de que haya un nuevo Congreso con una nueva correlación de fuerzas tras las elecciones generales más favorable a la izquierda».

El fundador de Izquierda Unida, ahora totalmente apartado de la política activa, vincula la sucesión en la Corona al «efecto Podemos» y cree que en sus protagonistas está muy presente que «la II República llegó con unas elecciones municipales», como las del año que viene. «Tienen la previsión de más avance de la izquierda», dijo esta mañana a ATLÁNTICA XXII desde su domicilio en Oviedo.

Iglesias piensa que Juan Carlos I «vivió mucho tiempo de las rentas del 23-F y ahora la gente descubre que fue lo contrario de lo que nos contaron». El ex minero asturiano recuerda que aquella noche «todos nos preguntábamos por qué tardaba tanto en salir el rey en televisión», lo que se produjo de madrugada. Ahora opina que la de Juan Carlos I «era una imagen patética, al margen de la corrupción» que ha salpicado a la Casa Real.

Gerardo Iglesias recibió con gran satisfacción los resultados electorales del 25-M y se muestra «preocupado y esperanzado». Aunque no puede participar activamente en ningún proyecto político por sus problemas de salud, se suma a la confluencia entre Podemos e IU. «Todo mi apoyo moral para que eso cristalice en algo nuevo, pero verdaderamente nuevo». En ese sentido observa que hay un sector de IU muy abierto a los cambios, pero también otro «muy anclado en el institucionalismo».

«El debate que plantea Podemos se inició con la creación de IU, que luego derivó en lo que derivó», dice el fundador de la coalición con pesar. Ahora estima que «IU y Podemos se necesitan recíprocamente. Y en esa confluencia deseable «IU puede ayudar, con todos sus defectos, de cara a una alternativa de gobierno». «Veremos si están dispuestos a salir de la trinchera», concluye.