
Hospital de Jove en Gijón, ejemplo del deterioro de la sanidad pública. Foto / Alex Piña.
Si en algún hospital asturiano se nota el deterioro que padece la sanidad pública es en el de Jove. Continuos ceses de médicos, traslados de pacientes con tumores y finalmente el despido del jefe de Urología han convertido al hospital gijonés en un polvorín, provocando la movilización de los usuarios. El conflicto cuestiona el nuevo modelo sanitario y las relaciones entre profesionales médicos y gestores políticos.
El deterioro en la sanidad pública se observa especialmente en Asturias en el Hospital de Jove de Gijón, donde ha aflorado un debate pendiente, el de la gestión profesional, donde hay dos bandos enfrentados. Usuarios y médicos por un lado, que abogan por mantener el modelo consolidado, con el paciente y la paciencia como ejes, y administradores por otro, que buscan principalmente resultados económicos inmediatos bajo directrices políticas. Este enfrentamiento ha estallado en un centro con más de 600 trabajadores y 209 años de historia, regido ahora como fundación por un Patronato. En los últimos años, por su dirección médica han desfilado cinco personas. Además, 17 médicos dejaron el hospital en los últimos meses. Y por el servicio de Urología, con dos jefes en 12 años, pasaron ya 16 especialistas.
Desde hace ocho años, el puesto venía siendo ocupado por el doctor Safwan Escaf, de sesenta y dos años, que además de cirujano es profesor titular de la Facultad de Medicina de Oviedo. La incorporación a Jove de este médico de origen sirio, que ya estudió la carrera en Oviedo, tuvo que ser respaldada en su día por el rector y el consejero en la misma comisión paritaria que acaba de revocar la elección y despedirlo. No obstante, Escaf sigue figurando como jefe de servicio de Urología en la página web del hospital, pese a que ya no trabaja allí. También atiende una consulta privada en Oviedo.
Su desencuentro con el gerente del hospital, José Luis San Miguel, desencadenado abiertamente desde el pasado mes de febrero, motivó el despido, que ha generado protestas de las que tanto la Consejería de Sanidad como la Universidad de Oviedo tienen conocimiento. Las críticas se centran en el gerente y en la directora médica, Begoña Álvarez, a los que se acusa de tomar «decisiones políticas». El Patronato y la Consejería de Sanidad deberían tener un papel de mediación que, al menos de momento, no ha conseguido detener el deterioro denunciado. La gerencia del centro declinó ofrecer su versión. San Miguel es un economista que lleva 20 años al frente del Hospital de Jove y más al servicio de Administraciones socialistas. Escaf le considera un comisario político y se siente un indignado en defensa de la sanidad pública.
Plataforma de afectados
La plataforma denominada Movimiento Ciudadano de Afectados del Hospital de Jove resumió en seis folios, en julio, lo que titula una “Cronología de una injusticia a un gran médico”. En 19 puntos, en los que se ensalza la buena praxis de Escaf, la plataforma expone un pormenorizado repaso desde el pasado mes de abril que desemboca en la petición de “una investigación y si es posible una auditoría externa” sobre “el comportamiento” del gerente “con pacientes y trabajadores durante los últimos años”.
El documento parte del momento en que el gerente y la directora médica del hospital deciden aumentar el número de pacientes en las consultas de tarde. Y, tras argumentar la oposición e inconveniencia médica esgrimidas por el servicio de Urología, agrega que Escaf propone al gerente que si hay que aumentar el número de consultas, se haga, pero en tiempo de compensación horaria, como se venía haciendo hasta el momento. Y continúa: “La respuesta del gerente es clara y contundente: ‘Los pacientes se deben de ver al ritmo que yo impongo y en tiempo y horario que yo marque’. Sin ninguna otra consideración”.
El 13 de junio, “el gerente, en reunión ordinaria con la junta facultativa de Jove, comunica el cese del doctor Escaf”, a pesar de que, al ser preguntado sobre el relevo, contesta: “No tengo sustituto y va a ser muy difícil sustituirlo, ya que existen dificultades para encontrar (…) determinado perfil”. Es entonces cuando los pacientes comienzan a organizarse como colectivo ciudadano, se constituyen en plataforma, elaboran un manifiesto, recurren a los medios de comunicación y llaman a una solución picando a las puertas del consejero y del presidente del Patronato, al tiempo que recogen firmas de apoyo.
Los denunciantes aseguran que los hechos que exponen son semejantes “en otras áreas del hospital, aunque sus responsables no se atrevan a manifestarlos públicamente”.
Caza de brujas
A partir de ahí, los denunciantes afirman que se desata una caza de brujas en toda regla, con acusaciones y amenazas dentro del ámbito hospitalario, donde se impone la versión de que “todo es invención del doctor Escaf y de quienes lo apoyan, especialmente los pacientes». Mientras, el Gobierno asturiano y el Patronato acceden a escuchar las protestas y prometen su mediación para una solución que no llega. Una vez que es “inminente” el cese de la comisión de servicios del hasta ese momento jefe de servicio de Urología, se empiezan a derivar enfermos con patología tumoral preferente al hospital de Cabueñes, mientras otros pacientes son derivados al Hospital Valle del Nalón, en Riaño (Langreo).
A finales del mes de junio, circula en los mentideros del área sanitaria la explicación de que Escaf pidió su regreso al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), hecho que tanto él como la plataforma que lo apoya niegan por ser “absolutamente falso”. Ellos entienden el desenlace de una manera muy distinta: fue el gerente “quien en un escrito dirigido a la Comisión Paritaria Instituciones Sanitarias-Universidad de Oviedo ha pedido que lo devuelvan a Oviedo». Los médicos que son profesores titulares de la Facultad de Medicina tienen categoría laboral de jefes de sección en el HUCA, hospital de cuya plantilla forman parte.
El Movimiento Ciudadano de Afectados del Hospital de Jove, primera organización hasta la fecha en Asturias contra las modificaciones del modelo sanitario consolidado, deja en este punto, según un portavoz, el asunto en manos de las asociaciones de vecinos de la zona afectada. El Hospital de Jove, con financiación básicamente dependiente del presupuesto autonómico, mediante convenio con el Sespa (Servicio Sanitario del Principado de Asturias), tuvo un presupuesto de 37 millones de euros en 2012 y superávit al cierre del ejercicio.
Es el hospital de referencia de las zonas básicas de salud V.1, V.2 y V.3, es decir, las del centro de salud del Natahoyo y el periférico de Tremañes, las del centro de salud de La Calzada y, ya en Carreño, las del de Candás y el periférico de El Empalme. Precisamente a esta zona básica del área V trasladarán este mes de septiembre los vecinos del oeste de Gijón la situación en la que se encuentra su hospital de referencia. Una asamblea informativa determinará entonces en qué queda o cómo continúa la protesta y la denuncia por el quebranto de la atención hospitalaria de 60.000 asturianos.
PUBLICADO EN ATLÁNTICA XXII Nº 28, SEPTIEMBRE DE 2013.
You must be logged in to post a comment Login