El cerco de Alaya a UGT se extiende a toda España

Pedro Sánchez con Justo Rodríguez Braga, secretario general de UGT-Asturias, el pasado mes de septiembre en Gijón. Foto / Marcos León.

La investigación de la jueza Alaya sobre UGT ha traspasado Despeñaperros y se extiende a otras federaciones del sindicato en otras Autonomías españolas, especialmente a Madrid y a Asturias.

En el último número de ATLÁNTICA XXII se informa de la investigación que dos agentes de la Unidad Central Operativa, el cuerpo de élite de la Guardia Civil dedicado a la lucha anticorrupción, llevan a cabo desde hace varios meses sobre la cúpula de la UGT asturiana, por supuesto enriquecimiento ilícito y malversación de dinero público.

La UCO, que actúa por orden de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, sospecha que los métodos de la UGT andaluza eran comunes en todas las federaciones territoriales del sindicato, especialmente en Asturias y en Madrid. Recientemente, tanto el secretario general ugetista Cándido Méndez como su colega en Asturias, Justo Rodríguez Braga, anunciaron que no se presentarán a la reelección en sus puestos.

Los casos de corrupción que afectan al sindicato socialista suponen un aprieto para el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, al que UGT apoyó en las primarias que disputó a Eduardo Madina.

La gran influencia política de UGT a través del PSOE es evidente en toda España y muy especialmente en las Autonomías donde gobiernan los socialistas. En Asturias los ugetistas controlan numerosos Ayuntamientos, agrupaciones del PSOE e incluso tienen relevante presencia en el Gobierno que preside Javier Fernández.